Ante el bloqueo que genera un lienzo en blanco y la inercia de comenzar por el principio con el primer color que aparece por la mente y las ganas de fluir, surge «Caída Oscura». Pétalos y formas transparentes, deseosos de interactuar con el mundo entero y de sentirse valorados por el resto, olvidando que el primer aprobado de éxito tiene que provenir por parte de uno mismo.
«Caída Oscura» (2017) – Acuarela – 23×15,7 cm